sábado, 22 de enero de 2011

Despiojar (quitar DRM) con el Calibre

Estamos de luctuosa noticia, Apprentice Alf se nos retira de la scene, o al menos eso es lo que cuenta en su blog. Para aquellos que no lo sepáis, el Aprendiz de Alf es uno de los gurús de esto de quitar DRM. No sé si será el que crea originalmente los scripts, pero sí que es uno de los más activos. Esperemos que sus nuevas inquietudes lo lleven a donde él quiera ir.

Lo interesante del tema es que, como despedida, ha dejado en su blog una serie de artículos más que interesantes, entre ellos uno dedicado a cómo quitarle el DRM a casi cualquier libro-e con sólo importarlo al Calibre. Y aquí os lo voy a contar yo, enlazándolo a él. Pero antes un resumen procedente de otra de sus entradas.

Pero antes de empezar, comentaros que esto que publico aquí no es para que pirateéis vuestros libros y los pongáis a disposición de los demás. Si no os gustan los precios de los libros-e en España, compradlos en otro sitio y/o en otros idiomas (como hago yo).

La única justificación para explicar y aplicar todo esto es la de quitarle el DRM a tus propios libros comprados por ti mismo. Es decir, no sé hasta qué punto es legal (me refiero a la legalidad al pie de la letra) quitarle el DRM a un libro-e, pero moralmente y lógicamente sí que es legal, o al menos coherente.

Si yo compro un libro-e, adquiero un derecho a leerlo cuando y como quiera, igual que cuando tengo uno de papel. Si un libro-p no caduca, el otro tampoco debe hacerlo. Pero el DRM añade una capa extra que me impide poder leerlo dónde y cuándo quiera. Es decir, si yo compro un libro-e con un Papyre, y luego la tienda cierra y yo cambio de aparato, si quiero leerlo tendré que volver a comprarlo. Pues no, mi derecho es leerlo dónde y cuándo quiera, y en el aparato que quiera. Por lo tanto tengo derecho a quitarle el DRM para, por ejemplo, poder leer mis libros comprados en Amazon para el Kindle en mi nuevo y flamante PocketBook 903. Y nadie me lo puede impedir.

¿Cuántos formatos con DRM hay en la actualidad?

Pues nada más y nada menos que siete, ocho si separamos el DRM de Mobipocket del de Amazon. Estos son:

1. Adobe Adept. PDF y ePUB, roto por I ♥ Cabbages.

2. Barnes & Noble. ePub variante del Adept, roto por I ♥ Cabbages.

3. Amazon Mobipocket. Dos formatos que se pueden romper con las mismas herramientas, extensiones prc, azw y azw1. Roto por The Dark Reverser.

4. Amazon Topaz, extensiones tpz y a veces azw1. Roto entre CMBDTC y some_updates.

5. Microsoft LIT, roto por drs.

6. eReader, extension pdb, roto por The Dark Reverser.

7. Apple Fairplay. Los ePub de iBooks de Apple. Sin romper a fecha de hoy.

Como hemos leído, solo el de Apple no se ha roto hasta la fecha, y supongo que porque da casi igual, ya que las ventas de libros en el iBooks deben ser testimoniales comparadas con las otras, ya no os digo en España que ni siquiera se pueden comprar.

Los scripts para Calibre, han sido creados por DapDealer. Con ellos podemos romperlos todos menos el de Apple y el de Microsoft, que necesita el ConvertLit.

Preparando el Calibre

Calibre es una aplicación de gestión de libros-e que ha cogido una gran preponderancia gracias a su modelo abierto y posibilidad de añadirle opciones. Ciertamente es un dinosauro de aplicación, escrita en Python, lenta, pesada en cargar, pero resulta enormemente útil ya que es multiplataforma, podemos ejecutarla en Windows, MAC y Linux y es capaz de convertir entre distintos formatos con una calidad más que aceptable. Además, está siendo mejorada de forma continua, con actualizaciones semanales.

1. Una vez que tenemos nuestro Calibre instalado y funcionando, tenemos que bajarnos los scripts para quitar el DRM. Los tenéis aquí o aquí. Por si los retiran de ahí, podéis buscarlos en Google como “tools_v3.2.zip”.

2. Descomprimimos ese fichero y nos quedamos con la carpeta “Calibre_Plugins”, que contiene cinco ficheros zip.

3. Lanzamos Calibre, nos vamos a Preferencias y seleccionamos Complementos, que está abajo a la derecha del todo.

4. En la ventana que se abre, apretamos el botón de “Add new plugin”, que está debajo del todo. Se nos abre el diálogo de abrir fichero. Nos vamos a donde quiera que hayamos guardado los ficheros zip que nos hemos bajado y seleccionamos uno de ellos.

5. Repetimos el paso siguiente con todos y cada uno de los cinco ficheros.

6. Cerramos todas las ventanas y reiniciamos Calibre. Ya sólo nos queda configurar los complementos.

Configurando los complementos

Volvemos a abrir Calibre, nos vamos a Preferencias y luego a Complementos. Elegimos “Complementos de Tipo de archivo” y abrimos el árbol. Ahí es donde están todos los scripts para quitar el DRM de cada formato.

Veamos ahora la configuración necesaria de cada uno. Para elegirlo, hacemos doble clic sobre el deseado y se nos abrirá una ventana en la que podremos meter las opciones.

1. Mobipocket (PRC): Para los PRC normales no pertenecientes a Amazon, es necesario saber el PID con el que se ha comprado el libro. En general suele estar en las opciones de la tienda donde se compró, y cada ordenador y aparato tiene uno diferente. Por ejemplo, Fictionwise permite hasta cuatro PID por libro-e (es decir, podemos dar de alta hasta 4 aparatos diferentes y cuando nos bajemos nuestro libro-e, podremos leerlo en esos cuatro lectores). Esos PID suelen ser de diez dígitos con un * ó un $ en el penúltimo carácter. Para meter esos PID, tantos como queramos o tengamos, hacemos doble clic sobre el complemento llamado “K4PC, K4Mac, Mobi DeDRM” y metemos todos ellos separados por comas.

2. Amazon Kindle (AZW, AZW1): Aunque aquí también podemos meter el PID de nuestros cacharrines Kindle si lo sabemos, también podemos meter el número de serie del aparato sin más. Abrimos el mismo complemento del punto 1 y metemos los números de serie, separados por comas, que se pueden añadir a los anteriores sin problemas. El número de serie viene detrás de los Kindle o en Menu -> Settings abajo del todo.

3. Amazon for PC/MAC: No tenemos que hacer nada, salvo tener el Calibre y el complemento instalado en el mismo PC que los programas originales. Los complementos tomarán lo que necesiten de los programas para hacer la conversión.

4. Adobe ePub o Adobe PDF: No hay que hacer nada, salvo tener el Calibre y el Adobe Digital Editions instalado y autorizado en el mismo ordenador.

5. Barnes & Noble ePUB: Abrimos el “Ignoble Epub DeDRM” y metemos nuestro nombre y el número de la tarjeta de crédito que tenemos en la cuenta de B&N, ambos valores separados por una coma y sin espacios en blanco entre ellos.

6. eReader de B&N o de otras tiendas: Tenemos que abrir el complemento llamado “eReader PDB 2 PML” y meter el nombre y los ocho últimos dígitos de la tarjeta de crédito con la que hayamos hecho la compra en las tiendas. Lo mismo que antes, no debe haber espacios en blanco a ambos lados de la coma ni en el número de la tarjeta de crédito.

Despiojando los libros-e

Esto es lo más fácil de todo. Una vez que lo tenemos todo instalado, tan sólo hay que importar el libro en el Calibre, o bien desde el menú o bien soltándolo sobre él. Calibre hará todo lo necesario para que la copia que importe ya no tenga DRM y, cuando enchufemos un aparato, enviará el formato adecuado a él sin DRM.

Ya está, eso es todo.

viernes, 7 de enero de 2011

PocketBook 903: Trucos varios (e impresiones)


En esta tercera y creo que definitiva entrega voy a hablar de algunos aspectos técnicos del firmware que trae el lector. Ciertamente es más de lo parece, y ciertamente tiene unas posibilidades increíbles y, de hecho, cuanto más lo uso, más me gusta.
Es un duro competidor para el Kindle DX, y supongo que el 602/603 no le vaya la zaga al Kindle 3, al menos en prestaciones y rendimiento… a poco que los programadores de PocketBook se pongan las pilas con el firmware. Y desde luego, si me dejan elegir entre un aparato libre y uno propietario, ya sabéis mi elección.
Comentaros que no he vuelto a sufrir ningún cuelgue ni reinicio extraño…
Bueno, vamos allá con los trucos. Deciros que algunos, si no todos, también valdrían para el 902, 602 y 603…
1.- Uso de diccionario
En entradas anteriores he comentado que el acceso al diccionario no es todo lo óptimo que pudiera ser. Es cierto, pero podemos mejorar un poco el tema. Simplemente tenemos que irnos a la configuración general y asignar una tecla rápida al uso del diccionario. En mi caso ha sido la de Arriba del joystick, pero puede ser cualquiera.
Tras presionar esa tecla cuando estemos leyendo, y mientras se abre el diccionario, movemos la mano para coger el puntero, que es más o menos el tiempo que tarda a abrirse el diccionario. Y ya está, ya podemos puntear la palabra a buscar.
Si el diccionario se abre en la zona que queríamos puntear, con puntear sobre el centro del documento se moverá hacia abajo o hacia arriba y nos dejará libre el área cubierta.
Esto sólo funciona en el FBreader. En el visor de Adobe no funciona, y en la castaña del pdfviewer ese no lo he probado.
2.- Poner fuentes personalizadas
Yo en este momento estoy leyendo con las mismas fuentes que trae mi Kindle 3, la Caecilia STD Heavy, que podemos bajarla de muchos sitios que no voy a poner aquí. El precio en Adobe es de 34€, aquí, pero sólo la normal. Faltaría la cursiva, la negrita y la negrita/cursiva, lo que haría un monto de 136 euros, que ni borracho de vino voy a gastarme. De todos modos, si quieres ser legal, sólo tendrías que comprar la normal. Para las otras podemos usar otras fuentes ya existentes.
Para añadir fuentes al PocketBook 903, tenemos que dejarlas en /system/fonts de la unidad interna del lector. Si no queremos complicarnos la vida, tenemos que dejar los cuatro tipos: normal, cursiva, negrita y negrita/cursiva.
Se aceptan fuentes TTF, OTF y TTC (renombradas a TTF). Con eso solo ya tendremos en el FBReader la posibilidad de activar dichas fuentes.
Una fuente muy bonita y gratuita, y que yo usaba en mi antiguo Papyre es la Droid.
3.- Caecilia tal y como aparece en el Kindle
Después de dejar las fuentes Caecilia en la carpeta del punto anterior, y seleccionarla en el FBreader, veréis que aparece bastante mierdosilla y deslucida. No importa, vamos a cambiar eso.
Si habéis instalado el paquete entero, tenéis que tener fuentes Caecilia con Heavy en parte del nombre. Son esas las que nos interesan. Por lo tanto, el siguiente paso, consiste en irnos a la carpeta \system\config y abrir el fichero fbreader.cfg.
Ojo, tenemos que abrirlo con algún editor que soporte los finales de línea de Unix, como el PSPad, que os recomiendo.
Dicho fichero no es más que una especie de archivo de texto con un formato similar a los INI de Windows. Por lo tanto tenemos que modificar las líneas pertinentes y elegir la fuente adecuada. En mi caso, yo he puesto esto:
font=CaeciliaLTStd-Heavy.otf,20
font.b=CaeciliaLTStd-Bold.otf,20
font.bi=CaeciliaLTStd-HeavyItalic.otf,20
font.i=CaeciliaLTStd-Italic.otf,20
Dejando todo lo demás como estaba. Y ya está, ya tenemos la misma fuente que en el Kindle y con la misma calidad.
4.- Personalizando PocketBook
El fichero que he citado anteriormente es el de configuración que la gente de PocketBook ha tenido a bien especificar para el FBreader como configuración estándar. No es ni de lejos todo lo que este programa permite hacer. Bueno sería que dejaran acceso al ui.xml y al config.xml, pero de momento no es posible.
No obstante, en la carpeta \system\config\ y subcarpetas, tenemos una buena colección de ficheros de texto con las opciones del aparato. Algunas prometen ser interesantes, otras no son más que el resultado de cambiar las cosas desde el propio firmware.
5.- Estilos
Un fichero muy interesante es styles.xml, que contiene los estilos que se aplican en el FBreader y que podemos modificar a gusto. Aquí no os voy a explicar nada porque básicamente no tengo ni repajolera idea sobre qué siginifica cada estilo excepto los básicos, pero supongo que se pueden modificar sin problemas.
En mi caso, los indentados que aparecen en las revistas Asimov y Analog en mi Kindle 3 no lo hacen en el FBreader. Si alguien supiera qué estilo modificar, le estaría enormemente agradecido que me lo dijera.
6.- SDK
PocketBook sacó un SDK tiempo ha para las versiones antiguas de sus aparatos. También han prometido hacerlo para los nuevos aparatos en marzo. Según dicen en Mobileread, los programas construidos con dicho SDK no funcionan en los aparatos nuevos debido a algún problema de bibliotecas.
Aunque algún osado se ha atrevido a hacer un remiendo para que funcione, yo decido esperar hasta que salga el oficial.
¿Qué os parecería un port del CoolReader perfectamente integrado en el aparato? :-P

miércoles, 5 de enero de 2011

PocketBook 903: Segundas impresiones


Probar las cosas deprisa tiene sus ventajas… y sus inconvenientes. Entre ellos, falsas apreciaciones. Llevo toda la tarde leyendo con el cacharro y la verdad es que, si no lo trasteas a lo bruto, funciona bastante mejor. Pero vayamos con los detalles.
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No ha vuelto a hacer cosas raras en toda la tarde. He vuelto a formatear la SD desde Windows pero haciendo un formato completo y esta vez no sólo la ha reconocido bien, sino que también la ha mostrado en el explorador de Windows (tapando una unidad de red de mi NAS, pero bueno), cosa que antes no hacía (sólo mostraba la unidad interna).
En mi caso, no corrompe la estructura de ficheros al escribir sobre ella desde dentro del aparato, como les ocurre a otros (parece ser que el fallo está en SD lentas que no están bien soportadas por el kelmer, digo kernel del Linux que trae el cacharro).
Eso sí, la carga de documentos es bastante más lenta que la del Kindle, pero no más que las de otros aparatos similares, y desde luego más rápida que la de DR1000.
No obstante, no ha tenido ningún autismo no reinicio como los de ayer.
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He leído dos PDF. Uno de ellos es la revista Blaise Pascal que no sé por qué la recibo, que es un documento bastante difícil de leer, con muchas cosas raras. El otro es una novela que me he formateado yo mismo, cuatrocientas y pico páginas a doble columna y en vertical.
Del pdfviewer ese mejor no hablar. No es más que un truño de programa lentísimo y que encima no dibuja muy bien los gráficos. El de Adobe va muy bien, y es bastante rápido, sobre todo cuando tienes un rato el fichero abierto.
La primera la he leído en apaisado. Para cambiar de orientación se toma su tiempo, pero al final lo hace y, mientras se lo piensa, te pone un relojito de arena en una esquina (que ayer no vi). El avance de páginas y de partes del PDF es muy bueno y rápido, tanto o más que en Kindle DX.
Y tiene una cosa que no he visto en ningún otro firmware: en apaisado, cuando te estás moviendo por la página con las teclas del cursor, te muestra la sección visible respecto al total de la página en una esquinilla de la barra de tareas, y te pone una rayita en la zona de corte para que no te pierdas.
Es decir, cuando uno avanza una fracción de la página, el software no cambia justo por la zona de corte, sino que deja una parte visible repetida del bloque anterior. A mí me daba mucha grima leer así porque cuando subes los ojos te has perdido, y tienes que buscar por dónde ibas. En este cacharro, al dibujarte la raya, en seguida ves dónde está el corte. Genial.
El otro PDF lo he leído en vertical y de igual modo el paso de página es bastante rápido.
Una pega (o no) viene cuando cambias de visor. Si estabas leyendo con el Adobe, y cambias al otro, pierdes el punto de lectura (y supongo que todo lo demás). Y viceversa. De todos modos no creo que nadie use el pdfviewer para nada.
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También he leído un fichero en formato Mobipocket. Lo peor de todo es que no respeta bien del todo el formato. Los textos indentados (como entradillas y comentarios) no los indenta sino que los deja como texto regular. Supongo que será una limitación del CSS que han puesto más que del FBReader.
El paso de página es instantáneo. Sí: instantáneo. En el tiempo que mueves los ojos a la vez que haces clic para pasar a la siguiente, lo hace. Menos la vez que reconstruye la pantalla completa. Más rápido que en el Kindle 3, y con eso ya lo he dicho todo.
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He usado el diccionario, más que nada por ver cómo funciona… Y me ha cumplido como un jabato. Aunque sería de desear que implementaran el doble clic o algo similar, tampoco hay que moverse por tantas pantallas para llegar a él.
Bueno, pues eso es todo de momento. Ya os contaré más conforme vaya descubriendo.

martes, 4 de enero de 2011

PocketBook 903: Primeras impresiones


Esta misma tarde he recibido de Correos mi PocketBook 903, justo antes de Reyes para darme tiempo a mirarlo y toquetearlo con tranquilidad y a gusto durante el puente.
Para los despistados, el trasto es un lector de libros-e con pantalla de 9,7 pulgadas, con 3G (hay que meterle una tarjeta SIM), WiFi, Bluetooth, zócalo para tarjeta micro SD, y conector de carga/PC micro USB. Tiene TTS en una espuerta de idiomas y diccionarios, incluido el castellano con dos voces que nos podemos bajar de la WEB e instalar. Asimismo tiene sensor de orientación automático. La pantalla no es Pearl pero tampoco tiene mala calidad.
Quiero comentaros mis primeras impresiones, que no son muy positivas. Si queréis imágenes de un desempaquetado y algunos comentarios sobre el 902 (que es el 903 pero sin pantalla táctil), y que comparto casi plenamente, aquí tenéis esta entrada de Hedera en Lectores Electrónicos. El color del mío es gris metalizado. Por lo demás a simple vista es idéntico, salvo que el mío lleva un puntero (stylus) en la parte superior derecha.
En el ínterin, lo que no comparto con ella es el hecho de que a ella no le gusta que cada botón tenga DOS funcionalidades, una de presión corta y otra de presión larga… A mí me mola, ¡y encima se pueden configurar!
Ya que estamos en el tema de la configuración, deciros que este cacharro tiene muchas opciones y bastantes útiles. Otras son chorradas pero que vienen demandadas por la gente, como elegir un tema visual (sólo trae uno, pero dicen que en la WEB hay más) o la pantalla de espera y apagado. Aparte de eso, se pueden volcar y recuperar de la tarjeta micro SD, y soporta perfiles para varios usuarios, supongo que guardando puntos de lectura independientes además de las opciones. En eso es el mejor, por encima del Kindle y creo que de cualquier otro aparato.
El interfaz de usuario es bastante potente, con cosas de las que otros carecen. Tiene menús contextuales que se suelen sacar con la presión larga, y esa contextualidad te permite elegir visor para leer tu libro allá donde esté permitido, y trastear con los ficheros en sí. Puedes copiar, borrar, mover, enviar por BT, cambiar el modo en el que se muestran los ficheros…
La navegación por los ficheros no está nada mal. Aparte de la visualización por carpetas (pudiendo elegir qué ver: memoria interna, SD o ambas), tiene otra vista más en modo biblioteca, que te muestra los libros ordenaditos por pantallas enseñando la portada y otros datos interesante. Existe una tercera vista, la de la tienda online. Éstas se eligen a partir de la biblioteca, en unas pestañitas superiores. Deciros que es de lo mejorcito que he visto en aparatos de este tipo (evidentemente no es el Finder de MAC ni el Explorer de Windows).
La pantalla principal también tiene su cosa. Hay varios plugins o secciones. Tenemos un listado de los libros abiertos más recientemente. Y también la de elegir qué queremos hacer: ir a la biblioteca, a las fotos, a la música, a las aplicaciones (sí, soporta aplicaciones, y trae unas cuantas), escribir notas, usar el diccionario, buscar, ir a la configuración y finalmente registrar el trasto en la web de libros del fabricante. Luego disponemos de más recuadros a los que podemos anclar cierto contenido. Yo en este momento tengo seis, con un calendario, un reloj analógico, un diccionario, un sudoku, una calculadora y una vista de la tienda de libros que en este momento no muestra nada. Como casi todo en el aparato, para cambiarlos tenemos que hacer uso del menú contextual, que se saca manteniendo apretado el botón central del joystick o el puntero sobre la pantalla.
Supongo que conforme vaya pasando el tiempo irán apareciendo más widgets, porque otra cosa que mola mucho es que el disco interno contiene toda una jerarquía de carpetas en donde se van guardando las cosas y donde supongo se podrán añadir extensiones. Tiene toda la pinta de estar preparado para ello.
En la pantalla aparece la fecha y la hora, así como el estado de la batería, y clicando en ella se abre un curioso y bonito calendario.
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El hardware tiene pinta de ser robusto pese a ser de plástico. En la parte delantera, tenemos un joystick abajo a la derecha con las cuatro direcciones y un botón central. Al lado hay otro de atrás. En el lado derecho tenemos cuatro agrupados de dos en dos: ir a la pantalla principal y ver el índice, y pasar página adelante y atrás, cosa que también se puede hacer con los del joystick. En el lateral derecho tenemos cuatro más: dos para aumentar/disminuir el zoom y otros dos para el sonido. Lo mejor de todo es que son completamente configurables.
Lo peor es que el botón de encendido es demasiado sensible y se enciende o apaga con solo mirarlo. Esto tienen que mejorarlo. El LED de carga tampoco es que vaya muy fino.
La pantalla está rodeada por un marco bastante ancho a primera vista, pero luego uno se da cuenta de que, dado el peso, es justo el necesario para poder apretarlo con conocimiento de causa. Por detrás hay una tapa retirable, y si alguien sabe cómo se quita (sigo las instrucciones y no hay manera) que me lo diga o que calle para siempre (y entonces irá al infierno).
El sensor de orientación funciona de aquélla manera. O bien no se entera de los cambios o bien el filtro del firmware se pasa, porque hay que mantenerlo un buen rato en la nueva posición para que cambie… o darle unos pequeños “golpecitos”.
La duración de la batería no la sé, pero dadas todas las cosas que lleva no creo que sea mucha. Eso sí, el WiFi y el BT son automáticos, pero el 3G se puede desconectar con un pequeño botón que hay arriba.
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Hasta donde he podido ver trae 3 visores de libros-e diferentes. Tenemos el de Adobe con DRM para PDF y ePub. Pdfviewer como visor alternativo de PDF. Y luego el FBReader para todos los demás. Ya he dicho que se puede seleccionar el visor con el que abrir el libro para los ePub (FBReader y Adobe) y PDF (Pdfviewer y Adobe).
Las opciones de configuración del FBReader no son muchas pero son suficientes. Tres anchos de margen, tamaño y tipo de letra entre muchas y más que creo que se pueden añadir, interlineado, guionado y forma del párrafo. Desde luego no todas las que permite el programa. Poco se puede decir sobre la visualización de libros con este programa que no se haya dicho ya, porque es el mismo que traen la mayoría de cacharros clónicos. Decir que es suficiente, pero también podrían haberle puesto el CoolReader.
Del pdfviewer mejor no hablar. Menuda caca mierdosa, y lentorro como él solo. Encima la calidad de la visualización no es que sea para echar cohetes. Y no digamos el paso de página. Menos mal que el Adobe cumple como un jabato, y a los diferentes zooms que tiene, también soporta el modo reflujo.
No obstante, el visor de Adobe para ePub sólo permite hacer zoom del tamaño de la letra.
No he probado las anotaciones de libros, y tampoco las propias notas.
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Las pegas, que no son pocas
El TTS va. Y los diccionarios también. Es lo único que puedo decir, porque tampoco es que sean como para echar cohetes, y olvídate de eso de hacer doble clic con el puntero para ver la definición de una palabra.
Arranca bien (unos 20 segundos que no he medido), y también se apaga bien, pero por lo demás es bastante lentorro en la carga de libros y en el paso de página. Claro que estoy acostumbrado al Kindle 3, y lo mismo si estás usando otro no observas tanta diferencia. En el acceso a ficheros y demás, pues funciona como todos aparte de la funcionalidad extra que trae.
La calidad de la pantalla no está mal, casi a la altura de la Pearl del DX, y también es algo más lento que éste, pero no mucho más.
La mayor pega de todas es que a veces se queda autista y deja de responder a la pantalla y al teclado. O esperas un buen rato a que se recupere o lo bloqueas y desbloqueas. A veces no sabes si estás esperando a que pase algo o es que se ha quedado tonto.
También, a veces, se le va la pinza y se resetea. Y entonces te vuelve a preguntar por el idioma, te pide que aceptes el EULA y a veces hasta, sin previo aviso, te lanza el calibrador de pantalla, porque él lo vale. O te lanza la aplicación para registrarlo… Y por supuesto en el proceso has perdido la configuración del WiFi y demás…
No me reconoce la micro SD formateada en FAT32, sólo en FAT16. Y tampoco es capaz de formatearla. En lugar de eso se reinicia y pierde la configuración.
Si quieres borrar el estado del aparato (marcar todos los libros como no leídos, eliminar notas y marcadores, etc) hace un extraño y te lanza el calibrador de pantalla.
A veces te lanza el calibrador de pantalla sin motivo aparente.
Vamos, que al firmware le hace falta un buen hervor…